El Steampunk fue en sus inicios un subgénero literario derivado de la ciencia ficción, surgido durante la década de 1980. Hoy el Steampunk ha evolucionado hasta convertirse en un movimiento artístico, cultural y un referente del que la moda también se apropia y se inspira.
El Steampunk combina elementos antiguos con futuristas, desenvolviéndose en una ambientación donde la tecnología a vapor sigue siendo predominante, pero combinada con elementos futuristas.
Este movimiento está inspirado en autores como H. G. Wells y Julio Verne y de toda la ambientación encontrada en sus obras; por lo que podemos decir que este estilo pertenece a la corriente retrofuturista.
El steampunk se desenvuelve en una ambientación donde, como lo mencionamos anteriormente, la tecnología a vapor sigue siendo predominante, por lo general localizada en Inglaterra durante la época victoriana, donde no es extraño encontrar elementos comunes de la ciencia ficción o fantasía.
Reemplaza la electrónica, los modernos combustibles y los avances científicos por la tecnología a vapor (steam en inglés) y la combustión del carbón.
La moda se ha visto influenciada por este movimiento y la podemos encontrar en accesorios como collares, relojes y ropa que utiliza en sus diseños objetos como máquinas, aludiendo a la época de la revolución industrial y a una estética retrofuturista. En las prendas que siguen este estilo se puede resaltar el uso del cuero y la evocación a elementos de aviación antiguos, por ejemplo.